

Si eres estudiante y estás comenzando ahora el curso, sabemos cómo te sientes. Te has matriculado en muchas asignaturas y la información que te llega de cada una de ellas va a hacer que tu cabeza explote. Quieres enterarte de todo, pero es mucha información a la vez, como ocurre siempre cuando arranca el curso académico. Pues tranquilo/a porque en este post queremos echarte una mano contándote cómo llevar a cabo una lectura rápida sin que esta pierda capacidad comprensora y efectividad.
Sin duda, dominar la técnica para realizar este tipo de lecturas te resultará de gran utilidad cuando dispongas de poco tiempo para informarte sobre algo, para estudiar o para repasar tu temario. Así que saca tres minutitos para leer este artículo y seguro que lo agradeces.
El proceso de leer comprendiendo.
Una persona lee unas 250 palabras por minuto. Pero como estudiante, seguro que has notado que este ritmo a veces no es suficiente, especialmente cuando estás en plenos exámenes y son muchos los apuntes y libros que tienes que devorar.
En estos casos, saber realizar una lectura rápida eficiente te resultará de gran ayuda ya que puedes conseguir que tu velocidad lectora se incremente hasta las 500 palabras por minutos, y lo más importante, sin sacrificar su comprensión. Porque ¿cuántas veces has querido leer tan rápido que te has dado cuenta de que no te has enterado de nada de lo que has leído? Seguro que muchas. Y lo peor es que el tiempo que has invertido en esa lectura ha sido un tiempo perdido que no vas a recuperar.
Técnicas para conseguir una lectura rápida efectiva.
Para leer con más rapidez sin perder el sentido de lo que se está leyendo existen diferentes técnicas, aunque para poder ponerlas en práctica resulta fundamental conseguir previamente un buen nivel de concentración.
Ahora bien, a partir de aquí, todo es cuestión de práctica y técnica. Y como no podía ser de otra manera, de combinar a la perfección los elementos físicos que intervienen (ojos) con los elementos mentales (cerebro). Prueba con estas técnicas:
1.- Técnica del subrayado: Si utilizas un lápiz para marcar la línea por la que vas leyendo, evitarás saltos de línea que te hagan perder el sentido de lo que lees. Y si además de usar el lápiz para marcar la línea, lo utilizas para subrayar aquellas palabras más importantes, conseguirás no despistarte, estar más concentrado y leer con más rapidez.
2.- Técnica del zig-zag: Esta técnica de lectura rápida resulta muy eficaz cuando se hacen repasos de materias ya estudiadas. Al mover ojos y dedo en zigzag, buscarás sin darte cuenta aquellos términos que te hagan recordar lo que has estudiado, o al menos, los conceptos más importantes.
3.- Técnica de las palabras claves: También denominada lectura en diagonal, consiste en sobrevolar un texto buscando aquellas palabras más importantes. No deja de ser una variación de la técnica del zigzag solo que, en esta ocasión, se salta de párrafo en párrafo buscando la palabra clave que te permita obtener datos relevantes en poco tiempo y hacer memoria si se trata de una materia ya estudiada.
4.- Técnica de reducir la fijación: La fijación no es más que el campo visual en el que enfocamos nuestra atención cuando leemos. Normalmente tendemos a visualizar las palabras que pasan por delante de nuestros ojos. El objetivo de esta táctica es disminuir el número de fijaciones para lograr una lectura rápida eficaz.
Aquí, nuevamente puedes tomar un bolígrafo y practicar tus puntos de fijación para disminuir las pausas entre palabras y aumentar el ritmo de lectura, manteniendo la comprensión lectora. Si antes tendías a visualizar cada palabra de una oración, te darás cuenta de que puedes realizar una visualización por cada grupo de palabras, y así poder leer de manera más rápida y sobre todo sin perder el hilo.
Este tipo de lecturas tienen numerosos beneficios, comenzando porque te ayudan a ahorrar un tiempo que suele escasear, especialmente en los repasos previos a los exámenes o al comienzo del curso que te dan los temarios de muchas materias. Además, si estás estudiando para un examen final, esta lectura te ayudará a memorizar ideas y conceptos de manera más rápida, o bien, a asentar los que ya tengas interiorizados, por eso desde nuestro blog hemos querido mostrarte algunas maneras de ponerla en práctica.