En muchas ocasiones, comenzar la vida universitaria implica dejar el hogar familiar y trasladarse a otra ciudad, con la consecuente mudanza que esto supone.
Es más, para la mayoría de los estudiantes que se trasladan por motivos académicos, esta experiencia se repite varias veces a lo largo de sus años de carrera: muchos viven en pisos compartidos que deben dejar cuando termine el curso, mientras que otros deben hacer lo propio y abandonar temporalmente la residencia universitaria en la que se alojaban.
La parte buena de todo esto es que, a diferencia de una mudanza familiar en la que se suelen trasladar enseres, muebles, electrodomésticos… y otros objetos muy voluminosos y pesados, las mudanzas de estudiantes suelen ser más livianas e incluir solo objetos personales, ropa, material de estudio y, como mucho, algún pequeño electrodoméstico como una cafetera.
¿¿Sabías que para estos casos de mudanzas pequeñas existe una opción mucho más práctica y económica que los servicios de mudanzas tradicionales? Pues así es y esa opción son las llamadas mudanzas compartidas, pensadas especialmente para personas como los estudiantes universitarios que se trasladan con pocas pertenencias. De esta forma, pueden compartir los gastos de la mudanza y el vehículo del traslado, consiguiendo un servicio igual de cómodo y eficaz, pero pagando mucho menos. ¿Quieres saber un poco más?
¿Cómo funcionan las mudanzas compartidas?
Las mudanzas compartidas, también conocidas como groupage o mudanzas combinadas, se basan en un principio sencillo: varios clientes comparten un mismo vehículo de transporte para trasladar sus pertenencias. Cada envío ocupa un espacio determinado dentro del camión, y el coste total del servicio de mudanza se divide proporcionalmente entre los usuarios.
Este sistema permite aprovechar al máximo los trayectos y reducir notablemente el coste final del servicio, una modalidad muy apreciada por estudiantes y trabajadores temporalmente desplazados que no se suelen mudar con muchas pertenencias. En definitiva, una opción práctica, ecológica y económica que encaja con las necesidades de este público.
Para las empresas de mudanzas, este modelo es una manera eficiente de optimizar rutas y reducir desplazamientos vacíos. Y para ti, como estudiante que ha comenzado la universidad, supone una opción económica, flexible y respetuosa con el medio ambiente.
Ventajas de las mudanzas compartidas para estudiantes
1.- Ahorro económico real
La principal razón por la que las mudanzas compartidas son tan populares entre los estudiantes es el precio. Al pagar solo por el espacio que ocupan tus pertenencias, los costes pueden reducirse hasta un 60 % respecto a una mudanza convencional. No necesitas cubrir el alquiler completo del camión, ni abonar costes innecesarios por un servicio sobredimensionado. Además, muchas empresas ofrecen descuentos adicionales para jóvenes o universitarios, lo que convierte este servicio en una alternativa accesible para todos los bolsillos.
2.- Eficiencia y organización profesional
Compartir mudanza no significa improvisar. Las empresas planifican las rutas cuidadosamente, agrupando envíos con destinos cercanos para optimizar tiempos y recursos. De este modo, se mantiene la puntualidad y la trazabilidad del envío. En muchos casos, incluso puedes seguir el recorrido de tu mudanza a través de una aplicación o plataforma online, lo que aporta transparencia y confianza en todo momento.
3.- Sostenibilidad y respeto por el medioambiente
La conciencia ecológica es un valor en alza entre los jóvenes, y las mudanzas compartidas se alinean con esa filosofía. Al aprovechar un solo vehículo para varios traslados, se reduce la cantidad de viajes necesarios, lo que disminuye notablemente las emisiones de dióxido de carbono. Es una forma sencilla y responsable de contribuir a la reducción del impacto ambiental mientras te beneficias de un servicio más económico.
4.- Seguridad y garantía profesional
Compartir transporte no implica renunciar a la seguridad. Cada envío se embala y etiqueta por separado, de manera que las pertenencias de cada cliente se mantienen perfectamente identificadas. Además, las empresas especializadas cuentan con pólizas de seguro que cubren cualquier posible incidencia durante el traslado. Esto te permite viajar tranquilo sabiendo que tus objetos personales estarán protegidos en todo momento.
5.- Comodidad total
Las mudanzas compartidas son la mejor forma de simplificar un proceso que suele generar estrés. No tienes que preocuparte por alquilar vehículos, pedir ayuda a amigos ni cargar con peso innecesario. La empresa se encarga de la recogida, el transporte y la entrega en el destino acordado. Así, puedes concentrarte en instalarte y comenzar tu nueva etapa académica sin contratiempos.
En definitiva, las mudanzas compartidas representan una alternativa moderna, eficiente y sostenible para ti, que te estás trasladando por estudios. Es una forma inteligente de ahorrar, cuidar el planeta y facilitar tu adaptación a un nuevo entorno universitario.
Elegir este tipo de servicio te permite disfrutar de un traslado profesional, económico y sin complicaciones, demostrando que moverse dentro de una ciudad o de una ciudad a otra cercana puede ser tan fácil como comenzar un nuevo capítulo.
¿Estudias en la Universidad de Oviedo? ¿Vas a cambiar de piso compartido o de residencia universitaria este curso? Pues si es así, valora esta opción ya que muchas empresas de mudanzas en Gijón ofrecen este servicio que te puede venir como anillo al dedo.